Jardiel Poncela

Usted tiene ojos de mujer fatal. No pierdas la oportunidad de leerlo

domingo, 18 de septiembre de 2011

Y siempre me faltaba algo

He vivido siempre entre ensoñaciones de todo tipo. Cualquier cosa era una ilusión que se autoalimentaba, hasta que no quedaba resquicio de verdad ni de realidad posible. Y desde pequeña adornaba mi mundo, con elementos carentes, porque todo sería tan bonito si tuviera ésto o lo otro. Y así me encontraba con ese chico maravilloso y yo llevaba esa ropa que no tenía, o ese bolso que me hacía juego, o era más delgada o tenía otro coche. Soñaba despierta antes de dormirme, en clases o viendo una película aburrida, resultando de este modo, que lo que había conseguido, nunca era suficiente y mi vida, mi vida se escapaba entre sueños, encontrando desilusión allá donde respiraba, porque amar lo imposible siempre fue más bonito que leer la vida tal y como se nos representa. Hoy, mi presente es más feliz y completo que mis sueños, ya no ansío sino disfruto.

2 comentarios:

Tegala dijo...

Pues felicidades por eso!! Hay muchas personas que ponen condiciones o su felicidad y no viven los verdaderos momentos felices. Me alegra que ahora los vivas sin ansiar nada más, que si vienen cosas mejores, bien venidas sean... pero si nos quedamos como estamos también somos afortunadas.

Un abrazo.

Shubhaa dijo...

Lo malo de soñar despiertos es que nos perdemos lo que tenemos delante, lo que es real y tangible. Hace falta ser muy valiente para centrarse en el presente, pero ya sabemos que tú lo eres.
Abrazos aquí y ahora